Bad Bunny Celebrará “Listening Party” de su Nuevo Álbum en el Coliseo de Puerto Rico
La estrella del reggaetón, Bad Bunny, ha dejado a sus fanáticos en un frenesí con el anuncio de una “Listening Party” para su nuevo álbum en el emblemático Coliseo de Puerto Rico este jueves a las 10pm. La noticia llegó este martes, y la venta de boletos ya está disponible en Ticketera.com, según confirmó el propio artista.
Las redes sociales estallaron de emoción, especialmente cuando las imágenes comenzaron a circular mostrando a los fanáticos haciendo fila en el Choliseo incluso antes del anuncio oficial. Uno de los jóvenes fue reportado por Telenoticias, habiendo llegado desde las 2pm del lunes, mostrando el entusiasmo y la lealtad que los seguidores tienen por el Conejo Malo.
Este anuncio sigue a una serie de rumores que circulaban desde el fin de semana sobre un posible concierto del artista en Puerto Rico antes de que finalizara el mes. Además, el lunes se reveló el título de su nuevo álbum “Nadie sabe lo que va a pasar mañana”, que estará disponible a partir de este viernes. Bad Bunny compartió un vídeo en Instagram anunciando la fecha de lanzamiento, generando más de cuatro millones de ‘likes’ y casi 90,000 comentarios, reflejando la anticipación del público.
Bad Bunny, cuyo nombre real es Benito Antonio Martínez Ocasio, ha estado en una racha de éxito reciente, triunfando en los Premios Billboard de la Música Latina el pasado jueves. Se llevó a casa el premio al Artista del Año por cuarto año consecutivo, además de ganar en la categoría de Canción del Año por su hit “Tití me preguntó”. Durante la ceremonia, el artista también presentó una nueva canción en vivo, marcando su primera participación musical en los premios en cuatro años.
La “Listening Party” en el Coliseo es una oportunidad única para que los fanáticos disfruten del nuevo material de Bad Bunny en un ambiente en vivo y directo. Con los boletos ya a la venta, se espera que el evento sea una celebración memorable de la música y la cultura puertorriqueña, mostrando una vez más la conexión profunda entre Bad Bunny y su tierra natal.
